Spano: “Gracias a Ferro cumplí mi sueño”
Llegó desde Chivilcoy de pequeño. Hoy, hace historia en Ferro. Su presente, siendo una pieza fija en el quinteto diseñado por el entrenador Federico Fernández, y su rendimiento partido a partido, dan cuenta de ello.
“Una va creciendo y aprendiendo diferentes conceptos en el juego, pero lo que me marcó en este último tiempo fue cambiar hábitos y laburar el tema mental“, reconoció “Toto“, como le dicen en el Club, tras haber cumplido ocho años defendiendo nuestros colores.
Spano también ponderó el rendimiento de Oeste en la temporada de Liga Nacional que acaba de culminar. “Nos queda ese gusto amargo de no poder clasificar a Playoffs, porque creo que podríamos haber competido contra cualquiera como hemos demostrado. Nos costó la segunda etapa después de las fiestas y, cuando nos acomodamos, ya era tarde“, admitió.
Además del plano colectivo, Toto hizo referencia a su performance y manifestó: “En lo personal me llevo una temporada super positiva, creo que superé mis expectativas. Después de la lesión (NdR: rotura del ligamento cruzado anterior de la rodilla), solo quería volver a estar en cancha y sentirme bien. Eso lo logré y terminé jugando a un nivel muy parecido al que tuve antes de lesionarme“.
Spano siempre persiguió el sueño de vivir del básquet. Al respecto, dijo: “Lo buscaba desde chico. No sé si alguna vez me puse a pensar profundamente que estoy jugando en la Liga, viviendo del básquet. El día a día te lleva a hacer que se haga rutina, pero como digo: lo soñé y hoy disfruto de esto“.
“Ferro me marcó, me dio la posibilidad de crecer, formarme y poder jugar en un equipo profesional“, continuó. Y vaya si escribió historia en el Club: con una marca de 206 partidos en La Liga se convirtió, esta temporada, en el tercer jugador con mayor cantidad de presencias en la historia de nuestro básquet, solo por detrás de Gabriel Moravansky y Miguel Cortijo.
Acerca de este dato destacado, el jugador señaló: “No me lo imaginaba. Considero que es una locura“.
Al momento de definir al entrenador Fede Fernández expresó que “es difícil hacerlo en pocas palabras. Lo que más lo caracteriza es ser buena persona. Además de ser técnico toma un rol de ayuda y escucha activa, no solo con respecto al básquet, sino también en la vida. Me dio la confianza para poder jugar y me enseñó la importancia de entrar, defender y dar minutos de descanso a los demás jugadores”.
Finalmente, el jugador de 24 años proyectó la carrera que tiene por delante: “En el futuro, pretendo consolidarme como alguien de jerarquía en La Liga“.
Spano es un fiel reflejo de que el básquet de Ferro sigue siendo una catedral viva del básquet nacional.