Noche de estrellas
El estadio de Ferro lució una vez más su esplendor, como cada año ocurre en ocasión de realizarse la tradicional “Fiesta del Color”, esa increíble muestra de música y colorido en la que los chicos y chicas que concurren a las Vacaciones Alegres esgrimen, de la mano de un puñado notable de profes, todo un repertorio de coordinación, belleza, diseño y despliegue no exento de trabajo y dedicación que se codea con la perfección en cada movimiento.
Diseminados por el campo, bailando, armando figuras o representando; luciendo sus trajes ingeniosos y coloridos, chicos de todas las edades (desde los 3, hasta los 13), concentrados ellos, divirtiéndose también, exhibieron anoche ante una platea colmada de familiares (alrededor de 2000 personas) una historia prolijamente “contada”, que este año tuvo que ver con “El Deporte como parte integral de la cultura humana”.
Tras el desfile inicial de todos los chicos, se sucedieron cada uno de los cuadros relatados por Leandro Lunelli y Gustavo Poggi, integrantes del Departamento Físico que dirige Eduardo Pizzi, quien estuvo a cargo de toda la puesta junto a sus colaboradores.
Así fueron participando el cuerpo de líderes (Comienzo del movimiento); los Pulguitas, los más chiquitos de la colonia con apenas 3 años, quienes interpretaron cómo era el deporte en la antigua Grecia; El Grupo “B” (gladiadores del Imperio Romano); el Grupo “C” (egipcios entre esfinges y pirámides); Los Bajitos (el continente asiático y sus artes marciales); el Grupo “A” (deporte contemporáneo); el Baile de los Profesores que fue un verdadero ballet profesional y el Baile Final en donde todos juntos volvieron a lucirse.
Como todos los años, un cierre increíble de Fuegos Artificiales puso fin a una noche espléndida, que supo contagiar al barrio y fue seguida con atención desde cada balcón del vecindario, corroborando esa comunión que Ferro y Caballito promulgan y que va creciendo cada día.
Fotos: Paula Zotta y Ferro Oficial