Sergio Alcoba: “El Club me ha acompañado mucho”
A siete meses de asumir la coordinación del Fútbol Juvenil y la dirección técnica del plantel de Reserva, que en horas jugará la Super Final Anual del Torneo de Primera Nacional, Sergio Alcoba realizó un balance integral sobre su gestión.
En esta extensa entrevista, abordó muchísimas temáticas. Explicó la importancia de involucrar la tecnología en el desarrollo de los jóvenes futbolistas, el trabajo multidisciplinario que lleva adelante Ferro para potenciar a los jugadores, y los objetivos a futuro para acercarse a la elite.
– Sergio, se viene la final anual del torneo de Reserva de la Primera Nacional contra San Telmo. ¿Cómo ves a los chicos?
– Para que se entienda un poco, la final anual es porque se hizo un torneo largo de 23, 24 fechas, en las cuales nosotros tuvimos la suerte de salir campeón. Ahora se hizo un torneo corto, para que los equipos no se quedaran tanto tiempo sin jugar, de cuatro zonas de cinco equipos. Terminó ganando San Telmo. La preparación es la misma que cualquier otra, quitando la ansiedad a los chicos, uno no les puede poner presión porque ya jugar una final hace que ellos se motiven, y para ellos, en el crecimiento personal, es muy bueno, porque lo que se logra con eso es que vayan incorporando experiencia, ganando y compitiendo por cosas serias, donde sientan esa situación de arriesgar. Estamos todos preparaditos y enfiladitos para disputar la definición.
– Tuviste partidos importantes como entrenador en Inferiores, en Reserva ganaste contra Defensores de Belgrano en la última fecha para ser campeón y, para terminar coronando el año, afrontás una final. Recordemos que asumiste la Coordinación del Fútbol Juvenil y la conducción de la Reserva casi a principios de este año. ¿Cómo te preparás personalmente?
– La verdad que, por como soy como persona, me agarra tranquilo. Yo a ellos les digo que el éxito deportivo, en su carrera que recién se inicia, no se tiene que medir por resultados, sino por todo lo que pudieron haber crecido en ese camino cuando lleguen a Primera. Y en el caso mío, no me va a cambiar la forma de trabajar, la forma de apoyarlos en eso, por ganar un torneo o no. A todos nos gusta ganar, eso no cabe duda, pero no la búsqueda desesperada de ganar por cualquier forma, ni de cualquier índole o abandonando nuestras convicciones. Las convicciones las tenemos muy claras: todos los partidos intentamos salir a dominar. Dentro de ese dominio que planteamos, se dan diferentes circunstancias en los partidos. Eso significa que a veces podemos ser dominados por el rival o a veces empezar con un resultado negativo y poder darlo vuelta. Muchas veces nos plantean cosas que nosotros tenemos que modificar en el encuentro. Por ejemplo, en salidas desde el fondo: a veces salimos con dos jugadores, a veces salimos con tres, con cuatro. Bueno, nuestros futbolistas deben tener en claro todas. Uno como conductor les tiene que dar todas las herramientas para que ellos puedan resolver dentro de lo que se les proponga, el rival, el partido o uno mismo, porque muchas veces no estamos en un buen día, y también tenemos que entenderlo y poseer las herramientas para poderlo manejar.
– Cuando te tocó asumir el cargo de Coordinador de Juveniles, dijiste que también tu intención era darle un vuelco a la reserva, que empiecen a tener lugar jugadores más chicos, que comience a bajar la edad de competencia para que lleguen con mayor roce a la Primera. En tu primer año, con esta renovación, hiciste debutar chicos de 7ma División (categoría 2007), 6ta (cat. 2006), le diste mucho lugar a los chicos 2005. ¿Notás los avances en el cumplimiento de esos objetivos?
– Sí, la verdad que sí. Se dio la particularidad de que con estos futbolistas muy chicos se logró terminar primeros en un torneo y ahora jugar una final, contra equipos que ponen jugadores que vienen de Primera. Entonces, a nosotros eso nos vino muy bien. El objetivo está más que cumplido desde ese lado. Hoy tenemos jugadores 2003 que han firmado contrato -Matías Zubowicz, Gerónimo Govi, Laureano Marra-, hay jugadores 2005 que ya los ven de otros clubes y antes por ahí eso no pasaba mucho. No solo de otros clubes, sino también nuestro Club se da cuenta de que esos jugadores son potenciales para integrar un plantel de Primera. Entonces yo creo que estamos en el buen camino. Ya estamos planteando también la renovación de esos jugadores 2005 en un futuro, quienes serán sus reemplazantes, ya vienen los 2006, 2007, que son los que más protagonismo van a tener el año que viene.
Nosotros lo que tenemos que tratar es, como habíamos hablado la otra vez, elevar la competencia interna nuestra porque no podemos elevarla de otra forma, es el torneo que nos toca jugar. En particular, pudimos sumarles dos psicólogos deportivos. Yo acabo de cerrar con la Universidad Abierta Interamericana (UAI) un convenio a través del que estudiantes del Doctorado de Psicología en el Deporte van a venir a trabajar al Club bajo las órdenes de nuestros psicólogos, que no solo trabajan con los chicos, sino con nosotros mismos. Detectan indicaciones o reacciones nuestras para poder pulir y también hacernos crecer a nosotros. Incorporamos la tecnología, los GPS, para que también estemos más cercanos con los datos a Primera División, para compararlos con datos de otras categorías inferiores de primera edad. Son todos datos que a nosotros nos permiten el crecimiento. Tenemos el Departamento de Videoanálisis para filmar todos los partidos de local, tenemos los recortes de los partidos de fase de inicio, de fase de creación, de finalización, de todo lo que es pelota parada, entonces eso también nos da el perfil a nosotros. Todos los entrenadores trabajan a partir de ese análisis.
Tuvimos captaciones este año, y el año que viene se va a profundizar más. Ahora contamos con un nexo mayor con el Departamento de Captación, que fue muy bueno y es la base de todo. Tenemos hoy en día una charla mucho más fluida con el Fútbol Infantil, ya está armado el plantel 2010, que el año que viene va a ser 9na división, nos faltan definir dos o tres puestos que siempre dejamos libre para cuando vengan jugadores a probarse. Empezamos a viajar para dar clínicas. En diciembre tenemos una pautada en Misiones para llevar a otras provincias la marca Ferro. Hay un montón de proyectos y cosas nuevas que vamos haciendo desde la parte de la Coordinación y eso ayuda al jugador.
– Todas estas herramientas y la psicología deportiva son cosas que se implementan desde hace bastante tiempo, sobre todo en clubes de Primera División, pero en la Primera Nacional no está tan visto. Los GPS son una inversión por parte del club para poder tener informes más detallados de cada jugador, poder ver detalles más minuciosos que no se observan a simple ojo en el partido. ¿Insististe para introducir estos elementos?
– Yo soy insistente en un montón de cosas y el estar todo el día en el Club hace que me cruce con mucha gente a la que le digo: “Mirá, me hace falta esto para crecer“. Esto, luego de realizar un diagnóstico y demostrar por qué se necesita. No sirve si yo digo “cómprenme la última tecnología en máquinas para gimnasio” y de repente no las usamos correctamente, ahí algo está fallando.
Al club no le puedo decir nada, me ha acompañado mucho en todas las cosas, seguimos trabajando en conjunto con muchas reuniones. No me costaron las cosas que fui pidiendo, me las fueron cumpliendo y dando, tenemos materiales, tenemos elementos, los chicos vestidos, los chicos con ropa de viaje, tenemos la pensión, chicos que desayunan y almuerzan todos los días en el club. Todo lo que se va implementando es para empezar a profesionalizar, a interactuar más las áreas para hacer trabajos en conjunto y detectar qué problemática puede haber con un chico.
– Y además de todo eso, este año los chicos han tenido la oportunidad de revisarse con oftalmólogos, nutricionistas, se enfocan también en la educación a nivel escolar, que es una pieza fundamental. Es todo parte de una modernización y una profesionalización de las Juveniles.
– Sí, sin duda. Yo creo que en dos años debería estar todo mucho más aceitado, mucho más asentado. Hay una realidad y es que no es lo mismo un Ferro en Primera que un Ferro en Primera Nacional con respecto a la captación de nuevos valores. Va a faltar ese salto de calidad, que muchas veces puede ser por recursos humanos, puede ser por recursos económicos, puede ser la misma competencia. Más allá de eso, este Club le seduce a cualquiera, pero es una realidad también que en la competencia que hoy nos toca jugar, la calidad de futbolistas por ahí es otra. Entonces nosotros tenemos que agotar los recursos que hoy tenemos. Hay que pensar en un futuro en Primera , nosotros tenemos que pensar y nos tenemos que preparar para eso. El día que estemos en Primera, hay que tener todas las áreas bien trabajaditas para no sentir tanto el cambio.
– Te toca afrontar la final con algunas bajas, que seguramente habrán sido consensuadas al momento de decidir. Son los préstamos de jugadores que has tenido a lo largo de todo el año, como Lucas Ruiz o Gerónimo Govi. Llegan a una edad donde tienen que firmar un contrato y tener roce en Primera. Puede ser en B Metro, Federal A, o en este caso como les toca, en el Regional Federal Amateur, con la posibilidad de enfrentarse a jugadores que laburan, que viven de eso para comer y donde se juega un fútbol mucho más físico, que quizás en Reserva no se ve. ¿Cómo afrontás esto de cara a la final que se viene y, por otro lado, cómo ves los préstamos de estos chicos?
– Primero, como todo: la salida de jugadores de un plantel que está afianzado, implica que sean reemplazados por otros, que vemos cómo van a responder. Tengo futbolistas para reemplazarlos, no tendrán la experiencia que tendrían los otros manejando estas situaciones, pero estoy contento por ellos, para los que les va a tocar. Con respecto a los préstamos, yo lo veía bárbaro. Cuando a mí, dirigencialmente, me preguntaron qué opinaba, ni lo dudé. Al torneo de Reserva le faltaban uno o dos partidos, más este partido final y se acaba el año. Después lo que nos queda es entrenar y jugar amistosos. Entonces, prefiero que, desde mi lado, se vayan a préstamo hasta diciembre, después vuelvan con un roce de otro vestuario, jugar por plata, con gente más grande, otra competencia, otras realidades, conocer otros clubes, otra idiosincrasia.
No me importa jugar la final con un plantel nuevo. Lo que nosotros vamos a ver es el bienestar para ellos y para el Club, pensando a futuro en Primera División. Lo charlé con Jorge, que opinaba lo mismo, así que fue todo en conjunto. Se les dio la posibilidad a ellos: algunos quisieron, otros prefirieron pelearla desde adentro. Se quisieron llevar a jugadores muy chicos, pero el club, que creo que en esto estuvo bien, determinó que no es lo correcto darlos a préstamos sin tener contrato. Además, tenemos que pensar que esos chicos que nos querían llevar eran los 2005, que no hay que olvidarse que están estudiando el Secundario. Entonces, si se iban, dejaban parte del año de estudio, y no es la idea. Se sorprendían cuando veían chicos como Monserrat, Lucero, Gaby Ayala y Occhiuzzi. En fin, veo muy bien los préstamos en función de un futuro.
Hay que hacerle un seguimiento, como se le está haciendo a jugadores como Tomy Martínez (a préstamo en Atenas de Rio Cuarto del Federal A), como Yegros (en Central Norte de Salta, equipo del Federal A). Saber cuántos partidos juegan, cómo están, cómo se van sintiendo, si tenemos video, si no tenemos. Yo creo que hay que hacer un trabajo sobre ellos, porque no es darlo a préstamo y librarlos. Ellos tienen que volver y el cuerpo técnico tendrá que tener todo bien detallado sobre los chicos.
– Por otro lado, las categorías juveniles están definiendo las posiciones finales para tener la posibilidad de jugar primero una semifinal y luego una final para ser campeones nacionales. A vos te ha tocado el año pasado como técnico afrontar una de esas semifinales, y también le ha tocado a una de las categorías ser campeona. ¿Cómo trabajás desde la Coordinación con esto, con los entrenadores y con los chicos?
– Sin duda, uno no busca el salir campeón, pero sí el trabajo y la calidad de los chicos. Uno juega para que ellos ganen desde el trabajo. Nosotros tenemos un estilo de juego que se respeta, que eso no es lo mismo que un sistema táctico. El estilo de juego de Ferro cualquiera lo puede ver en las inferiores: intentar salir jugando de abajo, ser protagonista, el comportamiento dentro y fuera de la cancha. Después, si un técnico elige jugar con tres en el fondo, jugar 4-4-2, 4-3-3, 5-3-2. Mientras respete el estilo y se sepa a lo que se juega, no hay ningún problema. Este año hay tres categorías que están cerca de clasificar, que son la 2006 (6ta división), la 9na, que es su primer año y está peleando, y la 2007 (7ma división), que fue la que salió campeona el año pasado. En esa tuvimos la desgracia de que un jugador que hoy estaría jugando en Reserva, Nico Raggio, tuvo la complejidad de la rotura en una rodilla.
Las que sí sufrieron fueron las dos categorías más grandes, al hacer el cambio para que en Reserva jugaran más chicos, entonces esas categorías quedaron un poquito disminuidas desde ese lado, pero siempre fuimos competitivos. Las inferiores de Ferro terminaron en los primeros tres, cuatro puestos de la tabla general. Siempre intentamos tener competitividad. Vuelvo a repetir, la captación fue muy importante para que nosotros pudiéramos seguir elevando el nivel.
– Esta impronta, este estilo de juego que queda marcado en Ferro en absolutamente todas las categorías, también ayuda a la adaptación de los chicos cuando tienen la oportunidad de tener un roce en Reserva o con categorías más grandes, como le ha tocado, por ejemplo, a Tiago Esidin en 4ta; o a Nahuel Peralta, de 7ma, que le ha tocado jugar en 6ta.
– Sí, yo creo que eso también se va a ir reflejando y profundizando el año que viene, donde más chicos van a ser promovidos. Pongo el caso de José Burali, que es un chico de la selección sub-15 de Paraguay, donde fue titular en un torneo internacional. Un chico que llegó por la interacción que empezamos a hacer con Pontevedra. Juan Cruz Anselmi, que está a cargo con Paolo Rosso de todo el proyecto de las selecciones juveniles de Paraguay, me conoce a mí, me preguntó si nosotros teníamos chicos descendientes de paraguayos, de padres o de abuelos, y yo le recomendé a José. Les gustó el nivel, hicieron preselecciones, y sobresalió en este cuadrangular en el que jugó de titular los tres partidos. Con ese nene que el año que viene que sería de 7ma división, para elevar la competencia interna de él y que no entre en una meseta de crecimiento, jugará una categoría más arriba, o dos, todo dependiendo del desarrollo de él. Cuando yo digo subir, es subir para jugar, no que suba para ser suplente en una categoría mayor. Y para nosotros el mejor refuerzo de una categoría, la tenemos que buscar primero en las categorías más chicas. Si no logramos tenerlo desde la captación de afuera, la mejoraremos con lo que viene de abajo y la segunda línea que viene de abajo reemplazará a la primera, esa es la idea.
Entonces, tenemos tres categorías chicas muy buenas, con muy buenos proyectos, una 2010 que también viene con buenos proyectos. La idea es ir aceitando eso para que en el día de mañana la 4ta y la 5ta División estén integradas por chicos no solamente de edad pura, sino con chicos más chicos que vayan teniendo ese roce. Esta es la forma también de que empiecen a debutar chicos más chicos en Primera, porque en Primera División, cuando debutan chicos de 17, 18 años no es porque los sacaron de 5ta División, lo pusieron en Primera, y el pibe jugó como si nada. No, tuvo partidos en Reserva, como el Colo Barco, los jugadores de Vélez, futbolistas con 17 años, 16, que han debutado y han tenido un caudal de partidos en Reserva, han entrenado y han tenido roce previo de Primera División previo a debutar. Después tendrán el acompañamiento de todos, porque también le puede surgir a un chico muy chico que piensa que con 16, 15 años debutaron en reserva y ya están para jugar en Primera. No, es un proceso, y hay que acompañarlos.
– Nombraste el caso de Burali, Ferro ha tenido también otros jugadores que han tenido la posibilidad de estar en seleccionados juveniles, como Pocho Román, que pasó por sub-15, sub-17, y sub-20. Ferro ha entrenado a Airala, a Matías Ramírez, a Erick Granados. También están los chicos que están entrenando con la sub-20 del ascenso, como Penepil, Montserrat y el Colo Pinto, ¿qué les aporta esta posibilidad?
– Yo creo que a ellos les da otro roce, les da otro crecimiento. Yo a veces pongo el ejemplo de cuando uno juega a un deporte con amigos, al pádel, al ping-pong, a lo que sea, y de repente se empieza a encontrar con gente que juega mejor que uno. Eso empieza a elevar la competencia interna de uno. Después, las condiciones dirán para qué está, pero en el caso de José o de cualquier chico que tenga otro roce en una selección, los hace crecer, empieza a ver otro tipo de entrenamientos, otro tipo de seriedad, está enfocado de otra forma, ya empieza a ver que una selección es televisada a nivel internacional. No solo para ellos, sino también para una familia que hay que contener, hay otras tecnologías. En el caso de José, va a ser normal que cada vez que vaya a la selección tenga un GPS, una nutricionista, un fisioterapeuta, que los entrenamientos no solo sean en cancha, sino sean preventivos, de gimnasio, que tengan otro tipo de perfil en el crecimiento de ellos desde lo profesional.
En los próximos días, se va a cerrar un acuerdo para que la selección sub-15 de Paraguay venga a hacer un microciclo semanal acá al Club Ferro Carril Oeste. A nosotros nos permite ofrecer el espacio y la tecnología que tenemos. Dentro de ese microciclo hay un amistoso con una de las categorías nuestras, entonces también eso hace que los chicos empiecen a ver que hay compañeros que están en otro nivel de competencia. Y eso hace pensar que si entreno, puedo llegar. Porque en el caso de José Burali, se encontró que venía de Pontevedra, hizo el primer año de inferiores en Ferro y a los seis meses estuvo en una preselección de Paraguay y de repente se encontró viajando en un avión, jugando un cuadrangular internacional. Por ahí él no se da cuenta porque es chico, pero el crecimiento que él va a tener a nivel profesional es muy grande. Entonces nosotros también lo tenemos que aprender a capitalizar y abrirlos al contexto de sus compañeros, de decirles “miren que hoy están acá y mañana no saben dónde pueden llegar a estar”.
Sobre la Selección del ascenso, la prioridad siempre la van a tener las selecciones, hay muchos partidos del torneo de Reserva que ellos no jugaron porque estaban entrenando con la selección. Más allá de que sea selección del ascenso, no deja de ser la Selección Argentina a la que representan, y que el Club Ferro Carril Oeste tenga jugadores en cualquiera de las selecciones, nos viene bien. Como materia pendiente, yo siempre digo que me gustaría llevar una delegación de inferiores al exterior a jugar algún torneo.
– Cada vez que aparece un chico de Ferro o un chico del ascenso en una Selección llama la atención. Al ser tan chicos hay que mantenerlos con los pies en la tierra. ¿Cómo lo hacen?
– Ellos fueron seleccionados por su rendimiento en el Club, lo más importante que ellos tienen es el rendimiento en su Club. No solo el rendimiento deportivo, sino en los comportamientos. Entender también los vaivenes que pueden tener dentro de un club, no todos pueden mantener un nivel alto, es una cuestión de empezar a asentarse y de ir creciendo. Tiene que ser un acompañamiento general, desde el lado dirigencial también, porque pensá que si jugaron un cuadrangular que se vio a nivel mundial televisado y hay un montón de representantes, hay un montón de clubes que posan los ojos en esos chicos, hay enviados que van exclusivamente para eso. Nosotros tuvimos un arquero que lo estuvieron mirando para la Academia de la Juventus, que fue el arquero que yo tenía el año pasado, Lucas López (NdR: categoría 2007), y se fue a Italia y él no había jugado en ningún torneo internacional. Entonces imaginate con chicos que juegan un torneo internacional. El caso de Pocho que antes de que firme el contrato incluso ya había tenido la posibilidad de un ofrecimiento para hacer una prueba en Europa, y luego lo compra el Barcelona… lo vieron en una gira en Andalucía, en España, y le hicieron un seguimiento. “Lo que ves alrededor de una cancha, no es alambre. La forma del alambre son formas de ojos. Nunca sabés quién puede estar mirando… Y es una realidad eso.
Por eso hoy la preparación tiene que ser mucho más profesional de lo que era hace años. Como técnicos, como coordinadores, como preparadores físicos tenemos que aggiornarnos a las nuevas tecnologías. Hoy tenemos que entender a un chico que terminó el partido, salió y está con el celular en la mano o sacándose fotos, y uno dice “¿pero qué le pasa?”. Bueno, hay que entender también esos cambios. No todo lo pasado fue mejor, ni todo lo que hay hoy es peor, sino que si pensamos que todo lo pasado era mejor es porque nos estamos volviendo viejos. Hay que adaptarse a las nuevas tecnologías, a las nuevas formas, a los nuevos comportamientos. Era muy difícil antes que un jugador de Nacional B sea citado a una Selección. Hoy están citados, tenemos que estar preparados para eso. Que digan que el Club Ferro Carril Oeste está trabajando profesionalmente a la altura de cualquier club de élite.
Nosotros tenemos que acercarnos, dentro de los recursos con los que contamos y con los recursos futuros que podamos tener, a la élite de la élite. Porque tenemos que preparar a esos jugadores para eso. A eso apostamos, esos son los grandes desafíos que a uno le gustan, son los desafíos que a mí me mantienen constantemente en el club. Son las 6 de la mañana y ya estoy acá: primero entreno, después a las 7 ya estoy trabajando, termino con las categorías, almuerzo, vuelvo al club, paso por la pensión. Bueno, es un trabajo que a mí me gusta mucho.